La Música Tropical: Patrimonio cultural intangible de la humanidad


La Música Tropical: Nuestro Patrimonio Músico-Cultural

viernes, 13 de diciembre de 2019

La rama - Grupo Religión


Con este tema alusivo a una tradición navideña de Veracruz y otros estados del sur y sureste mexicano, termino la actividad de este año en el Blog.


Le doy infinitas gracias por el favor de su visita y espero seguir contando con ella el próximo año, si Dios nos da licencia y continúa prestándonos la vida para continuar en la misma labor.

Deseo que pase una Feliz Navidad en compañía de sus seres queridos y que tenga un Próspero Año Nuevo, colmado de bendiciones.

La rama - Grupo Religión

La ejecución del requinto por Francisco López es sensacional, disfrútelo.

lunes, 18 de noviembre de 2019

Nana Pancha - Pedro Infante con el Conjunto Astoria de Rafael Cabrera


Hoy se conmemoran 102 años del natalicio del más grande de los ídolos de México, Pedro Infante Cruz.

Se le recuerda con especial afecto, en esta ocasión con una de sus interpretaciones festivas. Disfrútelo

Nana Pancha - Pedro Infante con el Conjunto Astoria de Rafael Cabrera

miércoles, 13 de noviembre de 2019

Los luchadores - Conjunto Africa

La historia de la canción ‘Los luchadores’


La arena estaba de bote en bote.
Escrito en 1952, el tema de Pedro Ocádiz, fue olvidado hasta 1983 cuando de manera fortuita se convirtió en éxito popular y hoy es un himno del pancracio.

Solamente hay que escuchar la frase “La arena estaba de bote en bote…”, así como los primeros acordes musicales, para que el cuerpo se contagie de la alegría con una canción peculiar, la cumbia de ‘Los luchadores’, que alcanzó su boom, 31 años después de surgir de la mente de Pedro Ocádiz.

Hoy es común escucharla en cualquier lugar, más allá de las arenas o de programas dedicados al pancracio, incluso es bodas es normal ver a quienes amenizan, otorgar máscaras a los invitados.

Personajes básicos en la creación de este tema hablan de lo que significó en sus vidas, pues además de Ocádiz; su socio, Raúl Zapata Ferrer, y los hermanos Fernando y Raúl Patiño, miembros del Conjunto África hace 25 años, revelan diversas anécdotas.

Capulina la pidió.
Todo comenzó por un encargo del grupo Los Trincas, integrado por Raúl Zapata, René Morales y Gaspar Henaine ‘Capulina’, quienes le pidieron a Ocádiz, amante de los deportes, un tema gracioso para su programa televisivo. De inmediato, Pedro junto con Zapata se unieron surgiendo de sus mentes ‘Los luchadores’, uno puso la letra y el otro la música.

El primer grupo que la grabó fueron los Supersecos, pero no sucedía nada con el tema hasta que llegaron los hermanos Patiño con todos sus compañeros del Conjunto África con su anhelo de triunfo.

Al rememorar esto, Ocádiz se convierte en un niño con juguete nuevo al reconstruir la historia de ‘Los luchadores’, vuelve a sufrir con los momentos en que nadie la quería y sonríe abiertamente con lo sucedido años después. “Nos piden la canción y junto con mi socio Raúl la hicimos, pero nadie la quería, nos decían que como aquello de ‘El Santo, el Cavernario’…, eso fue en 1952”, recuerda.

Solicita el África canciones.
Momento cumbre en la historia de ‘Los luchadores’ fue la aparición del Conjunto África.

“Pasaron años y en 1983, estando yo en la dirección artística del ‘Club del Hogar’, se presentaba en nuestro programa el Conjunto África, con los hermanos Fernando y Raúl Patiño, quienes me pidieron unas canciones porque yo les daba temas a otros grupos y les puse cuatro y me dijeron ‘pues ésta sí’, ¿Cuál?, les pregunté, ‘la de las luchas’, me respondió Raúl y se la di. Ellos la graban y pasa que es un hitazo”, narra el que también fuera coordinador artístico de ‘Visitando a las estrellas’ con Paco Malgesto.

Por su parte, Fernando Patiño se mantiene agradecido con Ocádiz por haberles dado el tema que los catapultó a la fama.

“Es un tema que ya tiene 35 años que se grabó, prácticamente, y sigue como si se hubiera acabado de grabar, está súper vigente y le agradecemos a Don Pedro que ese tema nos lo haya dado a nosotros. Nunca pensamos que tendría tanta trascendencia; originalmente nos lo dio como lo tenía y se nos hacía demasiado chusco, buscamos la forma de irlo cuadrando hasta que quedó como está plasmado, él nos la presentó en un casete y se oía muy acantiflada, muy vaciada, hubo grupos que la grabaron así y no se notaba la pausa que llevaba”, dice Fernando.

Patiño narra que tras dar a conocer la canción, su hermano Raúl habló con El Santo para poder utilizar su máscara cuando tocaran el tema y al poco tiempo, Fernando hizo lo mismo con Blue Demon. Meses después la interpretaban con luchadores en vivo.

“Primero le llevamos la canción al Santo, lo contactamos en el Teatro Blanquita, hacía una temporada como escapista y, es más, mi hermano (Raúl Patiño) le pidió permiso de utilizar su máscara para las actuaciones. Posteriormente le pedimos permiso al señor Blue Demon, y yo me puse su máscara y así salíamos en las actuaciones; tiempo después, uno de los técnicos, al que le decíamos el Mudo, salió con la vestimenta de Blue Demon y hacía como que luchaba con mi hermano, pues yo ya no pude ponerme la máscara porque me encontraba tocando y más adelante ya incluimos luchadores profesionales que se lanzaban sobre el escenario”, recuerda Fernando.

Para Raúl Patiño, el haber portado la máscara de Santo fue como un sueño cumplido. “Tenía cuatro ídolos, en el box era mi tocayo el ‘Ratón’ Macías; en el futbol eran dos, como portero Jaime ‘Tubo’ Gómez y de delantero Salvador Reyes, y en las luchas pues El Santo.  Eso fue como un sueño cumplido para mí y cuando me ponía su máscara en las presentaciones llegué a sentir que era El Santo y los niños me seguían a donde me movía en cuanto aparecía con ella puesta”, recuerda con una gran sonrisa Raúl.

Quería cuatro rudos.
Ocádiz comenta que al hacer la letra pensó en darle fuerza, por ello escogió dos parejas del bando de los rudos y figuras emblemáticas como Santo, Cavernario y Blue Demon, pues pensó que eso iba a ser un extra para su tema. “Los que menciono son de los más grandes que hay o ha habido, y no nada más lo digo yo, también lo dice gente de toda América, de Oriente, de todos lados”, señaló.

Ocádiz nunca sostuvo un trato directo con el Enmascarado de Plata, a quien le dio un poco más de peso en su canción. “Al Santo lo llegué a tratar en las entrevistas con Paco Malgesto. Meses antes de morir se enteró de que yo había hecho esa canción prácticamente para él. En primer término lo menciono a él, luego al Cavernas, su contrincante iba a ser Blue Demon, con quien luego iba a ser compañero, y el Bulldog, que era un perro muy bravo, que ahora sé que sí existió y se llamaba Camilo Pérez”.

Las llaves.
Ocádiz, quien no se considera un luchador frustrado, habla de las llaves, movimientos que gustaban al público de la época, aunque hoy, ya es difícil verlas, pues se ha dado prioridad a los vuelos. “Yo digo métele la Nelson, la Quebradora y el Tirabuzón, en la canción puse llaves diferentes y aquello de jálale los pelos y sácalo del ring; si tú oyes la música puede ser un poema y hasta puede declamarse”, dice emocionado.

Fan del Gorilita Ramos y otros gladiadores que luchaban principalmente en arenas chicas, siempre admiró a El Santo, Enrique Llanes y Jack O’ Brien, entre otros, pues le ha tocado ser testigo preferencial en la historia de la lucha.

Rima con ‘desconocido’ Bulldog.
Don Pedro supo de la existencia de tal luchador al conceder una entrevista al Hijo del Santo en un programa radiofónico. Admirado del hecho, se le comentó al compositor que el feroz luchador respondía al nombre de Camilo Pérez Briseño. “Al hacer la letra utilicé la palabra de Bulldog, que era una luchador imaginario, pero hace poco me enteré que sí existió, nunca supe eso y hasta hoy sé que usaba el cabello chino”.

Curiosamente, Zapata, el socio de Ocádiz, sí conoció al canino. “Era sastre, tenía los cabellos alborotados y la cara de Bulldog, por eso le pusieron así; no sabía que el señor Ocádiz no supiera de su existencia”, comenta el músico.

Ladridos estelares en Televicentro.
El Bulldog, cuyo oficio fuera de los encordados lo realizaba en una sastrería por el rumbo de Salto del Agua, era uno de los luchadores estelares de las funciones que se hacían en Televicentro en aquel lejano 1952, año en el que surgió la canción de ‘Los luchadores’ y en el que participó en la película ‘El luchador fenómeno’. En ese entonces se le veía formar parejas y tríos con diversas personalidades.

El 12 de Enero en pareja con Wolf Rubinsky pierde ante la dupla formada por Enrique Llanes y Rito Romero. El 15 de Marzo hizo un trío con el Médico Asesino y Lobo Negro para vencer a la Tonina Jackson, Gorila Flores y Abel Krim. Todavía el 26 de Julio, nuevamente se le apareció Llanes, quien en mancuerna con el Gorila Flores venció a la pareja de Lobo Negro y El Bulldog.

La magia de Martínez.
Ocádiz recuerda que fue Luis Martínez, pianista de la Sonora Veracruz, quien le hizo los arreglos que marcarían para siempre a su canción. “Más allá de lo que hicimos Raúl Zapata y su servidor, el arreglo que le hizo Luis a esta canción fue darle un ritmo tropical muy sabroso, que está entre cumbia, salsa…, no sé, hace que al escucharla, de inmediato comiencen a moverse los pies en cuanto suena la campana y entra el ‘¡Lucharán…!’ El arreglo de Luis, el que vistió la canción, fue tal, que a la fecha varios grupos la han grabado imitando al Conjunto África y sí, la idea original de la música es que fuera pegajosa, tenía ritmo, pero el arreglo fue muy compatible con la canción”, rememora.

Santo no vio el producto final.
Uno de los momentos más dolorosos de la historia de la canción de ‘Los luchadores’, fue que El Santo, no pudo escuchar la versión definitiva. “A principios de 1984 sale el LP (Long Play) y los del África se lo llevan al Teatro Blanquita, donde les dijeron que ya estaba en el hospital, eso fue el 3 de Febrero y el 5 nos enteramos de que había fallecido”, lamentó Ocádiz.

Pedro Ocádiz

Pablo Pedro Ocádiz Guadarrama nació un 29 de enero de 1919 en Jocotitlán, Estado de México. Desde sus primeros años, su pasatiempo favorito era escuchar música.

Entre 1954 y 1960 trabajó como publicista de la Caravana de Estrellas Corona Extra, así tuvo la oportunidad de conocer a los artistas de la época. Al cerrar este ciclo profesional formó parte de la empresa Telesistema Mexicano, ahora Televisa, como productor y coordinador artístico al lado de Paco Malgesto, y El Club del Hogar; donde llegó a tener posteriormente la coordinación de 70 horas de producción semanales de los programas: Operación convivencia, Nuestra gente, Variedades de media noche, Sábados redondos y Divertidísimo.

Pedro Ocádiz compuso: La fiesta de mi pueblo, Noches de España y paralelamente, en coautoría con Raúl Zapata compusieron: Los luchadores, Playa Mocambo, Mi solapa, Sueños de Bohemio y Tu imagen, por mencionar algunos de sus principales temas.

Fue precisamente Los luchadores, la obra que mayores satisfacciones le ha brindado, a pesar de que tuvieron que pasar 31 años de haberla escrito, para que se haya hecho famosa con el Conjunto África en 1983.

En cuestión de reconocimientos, Pedro ha recibido diversas preseas como las Palmas de Oro, El Mezcli, El Sol de Oro, La Diosa de Plata y El Azteca de Oro; asimismo varios homenajes como el de OCESA en la Feria de la Ciudad de México del 2006; en 2008 el de los Guerreros del Ring y el Reconocimiento Trayectoria 50 años que le otorgó la Sociedad de Autores y Compositores de México, además de algunos de SOCICULTUR en varias Delegaciones del Distrito Federal.

Pablo Pedro Ocádiz Guadarrama falleció el 18 de mayo de 2016.

Raúl Zapata

Héctor Raúl Zapata Ferrer nace un 11 de enero en Tizimín, Yucatán.

En el ámbito musical, contando con sólo 6 años de edad, comenzó a tocar la guitarra, y a los 10 ya se daba el lujo de cobrar por ejecutar el instrumento en fiestas y bailes. Comenta Raúl que respecto a su relación con la música, no llevó a cabo ningún tipo de estudio, ya que fue totalmente empírico. Asimismo, comenta: “Mi entorno familiar siempre estuvo acompañado de música, pero con el paso del tiempo fui yo quien destacó en ese terreno”.

Trabajó 15 años con el grupo Los Trincas, al lado de Gaspar Henaine (Capulina) y René Morales posteriormente con otra agrupación llamada Los Súper Secos.

Sus primeras composiciones datan de la década de los 40´s, y así nacieron sus canciones: No te necesito más y El pulquito; sus primeras grabaciones fueron en versiones de las Hermanas Navarro y Alfredo Pineda.

De los temas con los que comparte créditos con Pedro Ocádiz, son: Los luchadores, Playa Mocambo, Mi solapa, Sueños de bohemio y Tu imagen, por mencionar algunos. Los luchadores es la obra que mayores satisfacciones le ha dado.

A través de una carrera de 30 años actuando, Raúl Zapata tuvo la oportunidad de viajar por numerosas partes del mundo llevando la música mexicana.

Su trayectoria le permitió a Raúl Zapata recibir por parte de la SACM en el año 2007, en la ciudad de Guadalajara, el Reconocimiento Mtro. Gabriel Ramírez, por su aportación para la cultura musical de Jalisco para México, y en el 2008, la misma institución le otorgó el Reconocimiento Trayectoria 50 años.

Actualmente cuenta con 92 años de edad.
Fuentes:
https://divinortv.blogspot.com/2018/10/la-historia-de-la-cancion-los-luchadores.html
El Xocotépetl, Año 1, No. 10
http://www.sacm.org.mx/Informa/Biografia/25052
http://www.sacm.org.mx/Informa/Biografia/05005
https://www.ntrguadalajara.com/post.php?id_nota=61746

Los luchadores - Conjunto Africa

lunes, 4 de noviembre de 2019

La Pollera Colorá - Pedro Salcedo y su Orquesta


Crónica de La Pollera Colorá

Para varias generaciones de colombianos el título de esta cumbia representa alegría. fiesta y la expresión musical y cultural de su país. Su presencia, perdurable a través de los años, ha acompañado el vivir de las gentes y su éxito ha trascendido hacia otras regiones del mundo. Sin embargo, lo que no ha sido conocido de la misma manera es el hecho de que esta valiosísima composición, catalogada dentro de las 10 mejores canciones colombianas del siglo XX, según concurso realizado en 1999, nació en la ciudad de Barrancabermeja, Departamento de Santander.

Ocurrió por el año 1960 en el grill Hawai, ubicado al nororiente de Barrancabermeja, donde comienza el barrio Primero de Mayo, lugar que reunió la maravillosa interpretación del clarinete por parte de Juan Bautista Madera, la inspiración literaria y la expresión vocal de Wilson Choperena, con la inesperada pero afortunada aparición de Mirna Pineda, conocida en su medio como "La morena maravillosa", pero caracterizada dentro de la letra de la canción por el destello creativo de Choperena al llamarla "La negra Soledad". Mirna Pineda, una morena esbelta vestida con una pollera color púrpura con sus movimientos cadenciosos y sensuales propios del ritmo de la cumbia, dio un especial sentido a la composición que cautivó a todos los públicos con su canto y armonía.


Nace la composición inmortal

Inicialmente la contagiosa melodía fue puramente instrumental sin complemento vocal alguno, interpretada por Juan Bautista Madera Castro, un clarinetista excelso nacido en Sincé (Sucre) el 7 de mayo de 1922 en el barrio Guinea. El músico se radicó en Barrancabermeja en la segunda parte de la década de los años cincuenta, tiempo y lugar donde se dio el afortunado encuentro con Wilson Choperena, nacido en Plato (Magdalena) el 25 de diciembre de 1923.

Los dos artistas acordaron poner letra a la canción con los versos inspirados y escritos por Wilson Choperena, quien además fue el primer cantante de la composición así concebida, con la sonoridad y especial timbre de su voz, que desde el grito inicial cautivó a propios y extranjeros del puerto petrolero, estos últimos atraídos en ese momento por la actividad de los pozos "La Cira-Infantas", pero seducidos por la alegría y el ambiente festivo que irradiaba la melodía, dejándose llevar por el frenesí del ritmo y canto de esta deslumbrante cumbia colombiana.


El éxito creciente de la canción indujo a que muy pronto llegara el complemento orquestal para darle aún más realce. Fue así como apareció la orquesta de Pedro Antonio Salcedo Ortega, músico nacido en Corozal (Sucre) en 1909 y fallecido en Bogotá en 1998, quien por ese entonces estaba radicado en Barrancabermeja.

La unión de la orquesta con el clarinete de Juan Madera y la voz de Wilson Choperena produjo, de manera rudimentaria, la primera grabación de La Pollera Colorá en 1960, en la recién fundada Radio Pipatón, hecho que elevó notablemente la aceptación de la canción en los medios radiales locales, de manera que para las Fiestas de agosto se escuchaba en toda Barrancabermeja.

Pero el impulso definitivo vino con la grabación lograda en Barranquilla por el sello Tropical en 1961, con el apoyo técnico de Discos Fuentes de Medellín, dada al público en un vinilo de 7 pulgadas y 45 rpm (revoluciones por minuto).

A partir de ese momento, La Pollera Colorá sonaba repetidamente en todos los rincones de Colombia y su contagioso ritmo llegó hasta muchos lugares del mundo como un símbolo de la riqueza musical y cultural del país. Esta situación llevó a que la Orquesta de Pedro Salcedo, junto con Wilson Choperena se trasladara a la capital del país en 1965, mientras que Juan Madera regresaba a su ciudad natal.

Una cumbia de fama mundial

El éxito de la obra musical ha sido de tal magnitud que existen más de 30 versiones con diferentes intérpretes, dentro de las cuales se destacan, a nivel nacional, las logradas por las orquestas de Lucho Bermúdez, Pacho Galán, Fruko y sus Tesos, Checo Acosta y Guayacán. También han sido célebres las interpretaciones de Jaime Llano con Lucho Bermúdez, Juancho Vargas, Big Band Latin Jazz, Las Gaitas de San Jacinto, Charlie Zaa y Eddy Martínez.

Cabe destacar la versión instrumental producida por la Orquesta Filarmónica de Bogotá e incluida en su nuevo álbum "Clásicas Colombianas" en febrero de 2017.

Entre los países que recibieron la mayor influencia de esta obra musical figuran Venezuela, donde las orquestas Billo's Caracas Boys y Los Blanco tuvieron exitosas interpretaciones; Puerto Rico con La Sonora Ponceña y Tito Rodríguez; Cuba con La Sonora Matancera y Albita Rodríguez; En Chile, la llegada de la colombiana Amparito Jiménez y su unión con el grupo Giolito ayudó a difundir esta obra. También en esa tierra se escuchó la versión de Las Taconeras y Aticoy. En Agentina fue interpretada por la agrupación de música tropical Los Wawancó, compuesta por músicos de Costa Rica, Perú, Chile y Colombia. Perú la disfrutó gracias a la agrupación Los Hijos del Sol y México con la reconocida voz de Yuri.

Todas estas versiones tuvieron gran aceptación dentro de los países latinoamericanos y sirvieron como medio de difusión de la composición hacia el resto del mundo, situación apoyada por convenios de grabación con disqueras internacionales como Sono Inter. Como detalle curioso, la melodía fue interpretada por Bart Simpson en el capítulo once de la tercera temporada de la conocida serie de televisión norteamericana "Los Simpson" emitido por primera vez el 5 de diciembre de 1991.

Aunque los derechos de autor de La Pollera Colorá fueron registrados inicialmente en la Notaría Primera de Barrancabermeja por parte de Madera y Choperena el 24 de octubre de 1962, la permanencia del maestro Choperena en Bogotá creó confusión al ser identificado como autor único de la obra musical, favoreciéndose este último de los beneficios económicos derivados, lo que llevó al maestro Madera a instaurar una demanda cuyo fallo se produjo en mayo de 2010, resarciendo sus intereses. A pesar de las diferencias surgidas, los dos músicos mantuvieron su buena relación hasta la muerte de Wilson Choperena en Bogotá en diciembre de 2011, mientras que Juan Madera vive en el municipio de Sincé (Sucre), donde disfruta de su vida familiar plena de música y tranquilidad.


Es destacable la exaltación que la ciudad de Barrancabermeja hace a esta obra musical con la escultura erigida a la figura de La Pollera Colorá, elaborada por el artista local Jimmy Arroyo, ubicada en el Paseo de la Cultura de dicha ciudad, así como también la realización anual del Festival de La Pollera Colorá, cada 24 de octubre o en fechas cercanas, como conmemoración al registro de la obra en el Puerto Petrolero sobre el Río Magdalena. Estos hechos invitan a sus ciudadanos y en general a todos los santandereanos a difundir con mayor fuerza esta auténtica historia para algunos desconocida y para otros escondida en su pasado cultural.
Fuente: Revista Amigos y Socios, marzo de 2019

Nota al calce: La popularidad de La Pollera Colorá en México se debió en realidad al disco "A bailar la cumbia" grabado en 1964 por Carmen Rivero y su Conjunto, con la maravillosa voz de su vocalista Linda Vera.

La Pollera Colorá - Pedro Salcedo y su Orquesta